...Porque tus labios no supieron pedir ese favor...
Pensamientos sueltos...
jueves, 29 de junio de 2023
jueves, 2 de octubre de 2014
Secreto
Hay en esos labios delgados, un reto.
Hay en los dedos precisos, un hechizo.
Las uñas melón se me aparecen a diario, entre sueños.
Lo juro, no he enloquecido,
su codo es provocación,
y su rodilla la más clara señal de estamos en guerra.
Aparto la mirada.
Mañana, se lo diré mañana.
Hay en los dedos precisos, un hechizo.
Las uñas melón se me aparecen a diario, entre sueños.
Lo juro, no he enloquecido,
su codo es provocación,
y su rodilla la más clara señal de estamos en guerra.
Aparto la mirada.
Mañana, se lo diré mañana.
Aprendí a amarte así, como eras.
Aprendí a respetar, casi religiosamente, cada detalle tuyo. Jamás quise cambiarte, jamás quise moverte.
Fui suave, muy suave contigo
Y tú, conmigo, fuiste suave también
Me amaste como era
Me respetaste como se respeta a Dios, me permitiste ser, y fuiste feliz siendo conmigo.
Nos amamos así, de la forma más pura y más dulce en la que puede amarse.
Y luego decidí dejarte. Y te fuiste. Y creciste, y cambiaste, y te moviste.
Ahora te miro en fotos y reconozco de ti esas partes que amé tanto. A las que no conocí, a esas las admiro.
Fue un placer escribir una historia contigo. Fue un acierto dejar de escribirla.
Ahora puedo abrir el libro, releerla, comentarla contigo, y mirar hacia otro lado, y amar al hombre al que ahora amo tanto.
¡Qué gusto coincidir! ¡Qué gusto separarnos! ¡Qué gusto reecontrarnos así!
Buena vida para ti :)
Aprendí a respetar, casi religiosamente, cada detalle tuyo. Jamás quise cambiarte, jamás quise moverte.
Fui suave, muy suave contigo
Y tú, conmigo, fuiste suave también
Me amaste como era
Me respetaste como se respeta a Dios, me permitiste ser, y fuiste feliz siendo conmigo.
Nos amamos así, de la forma más pura y más dulce en la que puede amarse.
Y luego decidí dejarte. Y te fuiste. Y creciste, y cambiaste, y te moviste.
Ahora te miro en fotos y reconozco de ti esas partes que amé tanto. A las que no conocí, a esas las admiro.
Fue un placer escribir una historia contigo. Fue un acierto dejar de escribirla.
Ahora puedo abrir el libro, releerla, comentarla contigo, y mirar hacia otro lado, y amar al hombre al que ahora amo tanto.
¡Qué gusto coincidir! ¡Qué gusto separarnos! ¡Qué gusto reecontrarnos así!
Buena vida para ti :)
Tristeza
Cada cierto tiempo me sumerjo, como hoy, en la tristeza.
El viaje es premeditado.
Como el de un buzo, lo planeo con cuidado:
Un espacio para mí, viejos textos, música que esté impregnada de recuerdos...
Como navaja, hundo la tristeza en mi piel,
lo suficiente para que sangre tinta,
no tanto como para que no la detenga el papel.
Dejo que se hunda en mí, y me hundo en ella
Somos una sola esfera de llanto suave,
de lágrimas cálidas y amargas.
Una sola esfera de dolor viejo, de enojo rancio, de amor asesinado...
Cada cierto tiempo me fundo en tristeza,
En Tristeza. En Ella.
Tristeza es mi amiga.
Nos conocemos desde niñas,
y la entiendo siempre mucho mejor que a Alegría.
El viaje es premeditado.
Como el de un buzo, lo planeo con cuidado:
Un espacio para mí, viejos textos, música que esté impregnada de recuerdos...
Como navaja, hundo la tristeza en mi piel,
lo suficiente para que sangre tinta,
no tanto como para que no la detenga el papel.
Dejo que se hunda en mí, y me hundo en ella
Somos una sola esfera de llanto suave,
de lágrimas cálidas y amargas.
Una sola esfera de dolor viejo, de enojo rancio, de amor asesinado...
Cada cierto tiempo me fundo en tristeza,
En Tristeza. En Ella.
Tristeza es mi amiga.
Nos conocemos desde niñas,
y la entiendo siempre mucho mejor que a Alegría.
Acompáñame a amarme
Acompáñame a amarme, a entender lo bella que soy
Acompaña con tu mano a la mía, mientras recorre la línea que baja desde mi cuello hasta mi tobillo, esa línea larga y ondulada, que se replica en el otro lado de mi cuerpo.
Acompaña a mi voz con tu oído, y sigue el sube y baja de su canción.
Acompaña mis lágrimas con tu mirada, recógelas con los dedos, maravíllate junto conmigo de su claridad y de su elocuente silencio.
Acompáñame a adorarme, a descubrir la sensualidad que tenía guardada.
Y cuando gima, acompaña mi gemido con una caricia. Y cuando te mire, traviesa, devuélveme una mirada de maravilla. Y cuando me despoje de la razón, y me entregue por completo a ti, amor mío, descúbreme mujer, a la vez tuya y mía. Descúbreme plena, entregada, deseada...
Acompáñame a descubrirme lista. Sigue la maraña de mis pensamientos y aprende conmigo a desenredarla. Entra en mis pensamientos y cuestiónalos con suavidad. Déjanos a ambos maravillarnos con mi capacidad de responder, de argumentar... y después de ceder para encontrar el terreno que ambos pisamos.
Ven corazón, acompáñame a conocerme.
Acompáñame a descubrirme sensible. Disfruta mi rostro de enojo cuando alguna tontería lo provoque. Muéstrame un espejo, déjame saber cómo me veo cuando te sonrío coqueta, o cuando te miro pensativa. Toma mi mano... Acompáñame a amarme.
A cambio, te ofrezco todo lo que descubras.
Ven, y descúbreme completa.
Cobardía
Eran las dos de la madrugada y de la computadora salía sólo la voz monocorde de google translate leyendo, una y otra vez "Dearest sunshine" en danés.
Frente a la pantalla, una chica en falda floreada. Los ojos, hartos de no llorar, fijos en un punto indefinido, perdidos.
Sin maquillaje y sin juegos de luces, quedaba bien claro que la jugada del día era patética, y que la decisión del mes anterior había sido más por cobardía que por verdadera decisión
¿Cómo encender el amor de alguien que no cree en el amor? ¿Cómo salir de un beso que no terminó aún cuando no hay ya roce entre los labios? ¿Cómo unir la cuerda que, a la Brecht, fue ya cortada?
Y en la pantalla, el cursor parpadeando
Hoy es noche de escribir ensayo, y no de sumergirse en bobadas románticas.
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